Richard Dawkins: ¿Por qué estamos aquí?

Gran parte del pensamiento occidental se ha construido sobre la base de la excepcionalidad del ser humano, como ser de hechura y origen divinos. Como consecuencia de ello, también se estableció la excepcionalidad de la Tierra como único astro inmóvil del Universo… Sin embargo, tal excepcionalidad se ha venido derrumbando a través de dos revoluciones científicas: el edificio comenzó a tener grietas con la revolución científica del Renacimiento y su interpretación más profunda (Spinoza); y de la imponente construcción no quedó nada tras el terremoto provocado por la teoría de la evolución de Darwin, así lo vio Nietzsche antes que nadie.

Richard Dawkins, uno de los científicos y pensadores más interesantes de la actualidad, nos ofrece la respuesta de la ciencia actual a la gran pregunta filosófica: ¿por qué estamos aquí? Y lo hace de forma didáctica y amena. También lo hace con una valentía y optimismo que habrían satisfecho enormemente al creador de Zaratustra. Si tienes un rato aburrido, de típico despiste veraniego, observa este maravilloso documental, reflexiona sobre la propuesta de Dawkins y..., a la vuelta del verano, ya tenemos algo para debatir en las clases otoñales.

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Acerca de "La moneda de Schopenhauer"

La escena se repetía todos los días en "La Posada Inglesa" de Frankfurt. A la hora del almuerzo aparecía un hombre fornido, más bien bajo, de rostro tenso y dura mirada. Todos lo conocían, sabían de sus excentricidades, pero respetaban su presencia y porte solitario. Con un gesto que tenía algo de ritual, nuestro personaje extraía una moneda de oro de su bolsillo y la depositaba en la mesa. Terminada la comida, con cierto aire de resignación, su mano tomaba de nuevo la moneda y la volvía a introducir en el bolsillo. Su figura desaparecía rápidamente con un saludo frío y cortés.
Los otros clientes, soldados en su mayoría, hacían diversas conjeturas acerca de la moneda de oro que Arthur Schopenhauer, el gran pensador, el filósofo de la voluntad, dejaba ante sus ojos.
Finalmente, la curiosidad hizo que uno de ellos interrogara a Schopenhauer. La respuesta no se hizo esperar: "la razón no es otra que una apuesta que he hecho conmigo mismo. Después de acudir diariamente a este lugar y escuchar las conversaciones de los comensales, me dije que depositaría esta moneda en el cepillo de los pobres el primer día en que oyese hablar de algo que no fuera caballos, juegos o mujeres...".
Así era nuestro admirado Schopenhauer y nosotros queremos desafiarle. Queremos que, de una vez por todas, deposite la dichosa moneda de oro en el cepillo de los pobres.
Por eso hemos creado este blog. En él queremos reflexionar, indagar, comentar, todo tipo de ideas filosóficas, científicas, artísticas... Deseamos que este blog sirva de punto de encuentro con nuestros alumnos/as más allá del ámbito puramente académico. Juntos conseguiremos que el viejo filósofo se arrepienta de su atrevida apuesta...