James Randi no quiere ser considerado como un mago; él prefiere el título de ilusionista. La razón de este deseo reside en uno de los motivos principales de su vida profesional: denunciar a todos aquellos que se presentan como personas con poderes mágicos, paranormales, sobrenaturales y que, en realidad, no son sino charlatanes y estafadores sin escrúpulos. En esta divertida charla en TED, Randi nos da algunas de las claves en las que se basan los “magos” de pacotilla. Por si fuera poco, nos recuerda el ofrecimiento que la Fundación Randi ha hecho a todos ellos: dará 1 millón de dolares a aquél que pueda demostrar, en condiciones objetivas de observación, que efectivamente tiene poderes sobrenaturales.